domingo, 27 de mayo de 2012

La ternura y el cariño, la clave de la transmutación sexual


La educación sexual que hemos recibido es de muy mala calidad y la prueba es la deformación de la sexualidad, que solo es vista como una experiencia placentera que solo dura en promedio en el mundo 8 minutos.
Este escaso tiempo es coherente con el pensamiento capitalista de que el tiempo es oro, y un orden secular, donde la espiritualidad en nada tiene que ver con nuestras acciones y por consiguiente, la ética es ajena a la economía.
La magia sexual es un concepto espiritual y el Synergy Energy eXchange (SEX) es la placentera manera de intercambiar y equilibrar nuestras energías masculina y femenina, generando bienestar emocional, mental y físico. El intercambio de estas energías se van perpetuando, en la medida de la intensidad y duración, y es ahí, donde la ternura y el cariño cobran sentido diferente en nuestras vidas y en la magia sexual.
Estamos en un mundo patriarcal donde la razón, la lógica y la ciencia son los pilares en las que cimentamos nuestras creencias y por consiguiente, nuestras acciones y experiencias. De esta manera, las mujeres han dejado en la sombra la intuición, la creatividad y la conciencia y de esta manera, la Sacerdotisa que brinda con su magia sexual, el equilibrio emocional, se ha extraviado, y debemos de re-encontrarla para el bienestar de toda la Humanidad.
El Amor es unidad y la mujer deberá amarse nuevamente a sí misma, para unificarse y trascender el apego emocional malsano, hacia el macho.  Si no es así, el macho seguirá con su pasión y el fuego abrasador, en su lucha por conseguir el pan de cada día y de ahí surge, toda la violencia que experimentamos y las mil y una maneras de conseguir el apreciado pan, donde el fin justifica los medios. Y este “macho cabrío” al querer equilibrarse, descarga esa violencia en una relación sexual lujuriosa, en la que predomina la pasión y el fuego por conseguir un descanso, a través de un orgasmo masculino, que en su inmensa mayoría, no incluye el femenino. La mujer queda cargada de esta energía masculina, que sutilmente va expresándose en resentimiento, rabia consigo misma, autoritarismo y demás formas masculinas que se aprenden y se especializan, en su propia vida laborar, si la tienen, o en el campo militar en que se vuelve su hogar, y en el trato con sus hijos y con el mismo “macho cabrío”.
El buen trato se transforma en mal trato y todo por el mal trato que recibe de su amante por ignorancia de ambos, al ser tan mal educados en temas de sexualidad divina y amor. Nadie tiene la culpa y el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra. Esta pequeña gota la multiplicas y creas el océano de la Humanidad, donde el maltrato expresado en violencia, guerra y codicia, son el fundamento de sus acciones y todas ellas, por amor a nuestras familias y llevar seguro el pan de cada día  a casa.
Pero como el macho trae el pan de cada día, y el tiempo es oro y es lo más importante para vivir en este mundo, pues todo sigue en la normalidad de una vida cotidiana, que día a día, hora tras hora, va recorriendo los años y la costumbre es más fuerte que el amor. Y es lo mismo, si es una pareja que laboran y ambos traen el sustento a la casa. Aceptamos la descarga sexual, a cambio del pan de cada día pero la energía del amor es cada vez más pequeñita, que con el tiempo, ni los hijos ni la pareja, la sienten, ni ella misma puede atraer nada diferente, pues la energía que prevalece es la del temor: inseguridad individual, de pareja, de sobrevivencia, que se alimenta de las noticias de guerra, inseguridad, desempleo, pobreza, violaciones, corrupción y toda clase de experiencias que alimentan el terror, es decir, terrorismo masivo en medios masivos de terrorismo.
La mujer tiene en sí misma la ternura y el cariño y por ende, la solución.
Necesitamos de la sabiduría de nuestras mujeres que se aprende del amor a Dios en sus aspectos masculino y femenino, el Dios Padre/Madre. Mujeres, amen a la Diosa, la Divinidad Femenina, encargada de crear vida. Comprendan el poder espiritual, mental y amoroso que hay en el proceso de la menstruación y en las fases de la luna, que tienen una corresponsabilidad maravillosa. Jesucristo hizo su primera aparición resucitado a María Magdalena y le encargó a ella que se los comunicará a sus discípulos. El principal mensaje de Jesucristo, que está inmerso en el misterio de su resurrección, fué delegado a la mujer.
Hoy[1] se celebra en la Iglesia Cristiana el Espíritu Santo y este Consolador que dejo el Maestro, solo es posible comunicarse con él, para aprender Sabiduría, mediante la intuición que les sobra a ustedes. Mujeres, rescaten la Sacerdotisa y su poder mágico, a través de su principio femenino, donde la sensualidad, la ternura y el cariño son los pilares que lo fundamentan. Amen a sus amantes, desde sus fundamentos y no desde los fundamentos masculinos, y transmuten la energía masculina en amor, en ese Templo Sagrado que es la vagina, con todo el tiempo del mundo, con ternura y cariño. Enséñeles a amarlas, que dejen de masturbasen en sus vaginas y que dancen unidos, com-penetrados, en medio de ternura y cariño, donde los besos y el abrazo sea lo único que queme. Eleven esa energía juntos hacia las esferas de la mente y así transformarán la ciencia en conciencia y la razón en corazón.
Transformarán machos cabríos en hombres.
Sean las madres y amantes de su hogar. Madres tiernas y cariñosas y amantes tiernas y cariñosas y así la energía sexual del amor protegerá su casa y ella permanecerá unida.
Que cada menstruación, se lleve en su sangre, esa transmutación sexual y así la Humanidad, recibirá las pócimas mágicas de amor que estarán en el ambiente y como por arte de magia, la prosperidad tocará tu casa y con ella, el mundo se transformará en un hogar lleno de amor, libertad y paz, para el bien tuyo, de tu casa y de tus hijos.
Habrás alcanzado tu real posición en la Nueva Tierra. Amén.
Un abrazo de ALARAMON para ti que me estás leyendo y sintiendo y decreto para tu vida, bendiciones en la práctica del Tao del Amor.


[1] Domingo, 27 de Mayo de 2012

MISIÓN

Facilitamos el aprendizaje de ser amorosos y tomar conciencia del poder de la energía sexual como la principal fuerza creadora, sabiéndola utilizar adecuadamente.